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  • La zona, fundamental. Una vivienda correctamente ubicada gana enteros a la hora de que nuestra inversión sea un éxito.
    Las zonas actualmente en alza para invertir en vivienda en España son Madrid, Málaga, Valencia y Alicante, ciudades en las que la demanda de viviendas supera la oferta.
    Y una vez elegida la cuidad, es importante elegir una buena zona dentro de la misma, que sea moderna, equipada con todos los servicios y que sea dinámica.
    Las viviendas situadas cerca de núcleos de expansión de las ciudades y núcleos universitarios presentan más ventajas a la hora de poder alquilarlas.
  • El riesgo inmobiliario es otro factor importante a tener en cuenta. Existen diferentes perfiles de inversor, lo que implica compras diferentes y adaptadas a cada uno.
    Una zona con alta demanda, en caso de tener que vender el inmueble, permite asegurar una mayor liquidez. Estudiar detalladamente las expectativas de venta o alquiler de la zona es fundamental.
  • Si nuestra opción es una vivienda de segunda mano, sin reformar, es necesario que el precio tanto de la vivienda como el de la reforma prevista sea bajo, lo que nos permitirá obtener la rentabilidad deseada.
  • El estado general de la vivienda, metros cuadrados, si dispone de garaje y ascensor, ruido, orientación, número de dormitorios, son factores a tener en cuenta y nos facilitarán la posibilidad de alquilarla o venderla posteriormente.
  • Hay que contemplar el hecho de que las viviendas con lujos, pocos vecinos y gastos de comunidad elevados pueden suponer una disminución de la rentabilidad.
  • Si no es un experto inversor en el mercado inmobiliario y quiere que su inversión sea un éxito, aconsejamos consular con un experto del sector para cada lugar y así evitar riesgos innecesarios.